Para entender al 100% un contrato de un seguro de vida es importante que comprendamos correctamente quién es quién en el seguro.

Por eso, aquí te dejamos una breve explicación de cada una de las figuras que aparecen en los contratos de los Seguros de Vida.

 

Tomador:

En ocasiones, la persona que contrata un seguro de vida lo hace para sí mismo, pero esto no siempre es así. Por eso, los contratos de los seguros de vida contemplan dos figuras diferentes: el asegurado y el tomador del seguro.

El tomador de un seguro de vida es la persona que firma el contrato del seguro, convirtiéndose por tanto en el titular de la póliza y en el responsable de realizar el pago de las primas.

Como decíamos, puede contratar el seguro para una tercera persona, como su hijo o su cónyuge, o hacerlo para sí mismo, convirtiéndose así en asegurado además de en tomador.

 

Asegurado:

En los contratos de los seguros de vida la persona que está cubierta por el seguro es el asegurado.

Se trata de la persona protegida por las coberturas del seguro, por lo que, si esta fallece, es cuando la aseguradora haría efectivo el pago de la indemnización a los beneficiarios. Del mismo modo, en los casos en los que los seguros de vida incluyen la cobertura de incapacidad temporal permanente, esta cobertura se hará efectiva cuando el asegurado queda en situación de incapacidad a causa de un accidente o de una enfermedad grave.

Puede darse el caso de que en un seguro de vida existan varios asegurados, por ejemplo, en los seguros de vida que se contratan de manera conjunta para una pareja o en aquellos seguros de vida que se contratan de manera familiar incluyendo tanto al padre o padres como a los hijos.

 

Beneficiario:

El beneficiario en los seguros de vida es la persona que recibirá la indemnización en caso de que el asegurado fallezca. Es decir, es quien cobrará el seguro.

Esta persona es designada por el tomador del seguro (la persona que firma el contrato) en el momento de la firma, aunque puede modificarse en cualquier momento.

Hay varios aspectos sobre los beneficiarios que debes tener en cuenta al firmar un contrato de un seguro de vida:

  • Puede ser una sola persona o varias.
  • Puede designarse con nombre y apellidos o de manera genérica, por ejemplo, los hijos del tomador o el cónyuge.

Cuando se eligen a varios beneficiarios en un seguro de vida, se puede decidir si la indemnización se repartirá entre ellos a partes iguales o elegir el porcentaje que cada uno de ellos recibirá de la indemnización.

 

Asegurador:

El asegurador en los seguros de vida suele ser una compañía aseguradora o una mutua. Se trata de la entidad que asume el riesgo cubierto por la póliza y, por tanto, quien debe pagar la indemnización a los beneficiarios o dar servicio al asegurado en caso de que sufra un siniestro contemplado en el contrato del seguro.

Su obligación es la de abonar el capital de la indemnización en caso de producirse el suceso cuya cobertura esté incluida en la póliza (ya sea fallecimiento o incapacidad absoluta y permanente) y ofrecer los servicios incluidos en la póliza como asesoramiento y gestión de sucesiones, elaboración de testamento o borrado de vida digital.

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