Llegadas estas fechas, es común que los padres hayan enviado a sus hijos a algún campamento o actividad veraniega organizado para que aprovechen el tiempo de forma divertida y, por qué no decirlo, como medida de conciliación con los horarios laborales.

Como padres, lo importante es conseguir que los niños aprendan y disfruten de esta experiencia y evitar que esta quede marcada por cualquier incidencia, ya sea un accidente, una intoxicación u otra cosa. En este sentido, estos centros deben tener, al menos, dos seguros: el seguro de responsabilidad civil y el seguro de accidentes.

Ambos son obligatorios y si se complementa con un seguro médico, casi todas las eventualidades están cubiertas.

Desafortunadamente no podemos prever todo lo que puede pasar y cuando apuntamos a nuestros hijos a un campamento no conocemos la letra pequeña de sus seguros. Podríamos pues, encontrarnos con que su seguro no cubra las todas necesidades provocadas por un incidente.

Por ello es fundamental tener un as en la manga y proteger a los más pequeños para toda incidencia. Un seguro de accidentes que cubra el reembolso médico permite poner a nuestra disposición los mejores profesionales a precios increíbles.

 

Cómo reclamar en caso de accidente o incidente en un campamento de verano

Más allá de los casos más graves cubiertos por el seguro de accidentes existe otro tipo de reclamaciones menos conocidas provocadas por el estado de las instalaciones, la comida, actividades, horarios, etc. Si a la vuelta nos cuentan que no todo era tan bonito como pintaba la publicidad, tal vez tengamos que poner una reclamación.

Es importante comunicar al centro el desacuerdo y reunir pruebas de todos los problemas, facturas, fotos, correos, publicidad, etc. Si no se resuelve se debe solicitar la hoja de reclamaciones y enviar una copia a la Dirección General de Consumo junto a las pruebas recabadas.

Si la queja es desoída puedes acudir a las Oficinas Municipales de Información al Consumidor (OMIC) y presentar una reclamación. Ellos se encargarán de realizar los trámites precisos y realizarán una mediación entre las partes. Si tampoco se ajusta a tus expectativas, entonces podrás acudir a la justicia.