En anteriores artículos hablábamos acerca de la dieta vegana y de los alimentos que pueden sustituirse en una dieta omnívora o carnívora, pero lo más importante es tener mucho cuidado con cómo llevamos esa dieta.

En el caso de la dieta vegana, existen ciertos peligros por la falta de algunas sustancias que son positivas para el organismo. ¿Esto significa que por llevar una dieta vegana corres estos riesgos? La verdad es que no, pero siempre y cuando seamos conscientes de los riesgos que tiene para nuestra salud llevar mal esta dieta, al igual que otras.

El hierro nos aporta energía y ayuda al funcionamiento de los glóbulos rojos. Se puede encontrar en algunos vegetales, aunque con mayor dificultad para absorberlo, por lo que es recomendable consumirlo junto con Vitamina C para favorecer su absorción.

Todos tenemos un sistema inmunológico que debemos cuidar, porque nos protege de enfermedades y nos defiende ante virus y contagios, además de ayudarnos a cicatrizar las heridas. Por eso es importante que ayudemos a nuestro organismo incluyendo el zinc en nuestra dieta (un mineral mayoritariamente presente en alimentos de origen animal), por un complemento para tener nuestro cuerpo lleno de defensas y energía.

Cuando de pequeños nos decían que necesitábamos calcio para crecer no estaban nada equivocados. El calcio es importante para el crecimiento de los huesos y para la protección de los dientes, el problema es que proviene de animales en su gran mayoría, pero podemos también encontrarlo en los vegetales de hojas verdes, para ayudar a proteger nuestros huesos.

La Vitamina B-12 es fundamental en nuestra dieta, y si seguimos una dieta vegana, teniendo en cuenta que esta vitamina se encuentra presente en proteínas de origen animal, debemos intentar sustituir esa falta con bebidas de soja o suplementos alimenticios.

Para el correcto desarrollo del cerebro, el sistema cardiovascular y el sistema visual, toda dieta debe incluir ácidos grasos (omega-3), sin embargo, están presentes sobre todo en los huevos y en el pescado. ¿Solución? Suplementos alimenticios que te aporten omega-3 de forma natural.

Sigas la dieta que sigas, lo más importante es que siempre acudas a un especialista en nutrición que pueda recomendarte lo mejor para ti y sepa cuál es el procedimiento que debes seguir.