Las elevadas temperaturas del verano pueden agravar las enfermedades del aparato respiratorio si no se llevan a cabo una serie de cuidados sencillos y hábitos saludables. Hidratarse correctamente, evitar la exposición solar, sobre todo en las horas centrales del día, y aprovechar las primeras y últimas horas de la jornada para practicar ejercicio suave o caminar os ayudarán a evitar el empeoramiento de estas patologías.

Anualmente, las enfermedades de las vías respiratorias causan cerca de un millón de muertes en la región europea. De hecho, tanto en España como en Portugal ya son la tercera causa de muerte. Por lo tanto, en caso de padecer asma bronquial o EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica) es especialmente importante que sigáis cuidándoos también en esta época. Para ello, os facilitamos algunos consejos, para que vuestra salud no se vea afectada y podáis disfrutar plenamente de vuestras vacaciones.

 

Cuidado con el aire acondicionado

Si lo tenéis en casa, es importante que reguléis la temperatura entre 24-25ºC. En ningún caso debe estar a 18 ºC porque, al resecar el aire, puede incrementar vuestros problemas respiratorios. En este sentido, también debéis vigilar los cambios bruscos de temperatura al entrar y salir, por ejemplo, de un centro comercial o de un cine. A veces, la diferencia entre el interior y el exterior puede llegar a ser de 10 ºC. Por eso, si no queréis acabar con una infección respiratoria que complique vuestra enfermedad, mejor ser cuidadoso.

 

Playa vs montaña

Ambas tienen sus pros y sus contras. En la playa hay más humedad, que puede ser beneficiosa, pero en contrapartida hay más calor. En la montaña, el ambiente es más fresco, pero también es más seco. Lo ideal son los lugares con clima estable y moderado.

 

Los inconvenientes de las alturas

Si os gusta subir o escalar montañas, debéis saber que respiraréis un aire con menos oxígeno. Si tenéis problemas respiratorios, falta de oxígeno en la sangre o realizáis tratamiento en casa con oxígeno y estáis pensando en viajar a lugares con cierta altitud, debéis consultarlo antes con vuestro médico.

 

El tratamiento siempre a mano

En vacaciones, no podéis olvidaros de los medicamentos que tomáis y de tener el suficiente aprovisionamiento para todos los días que estaréis fuera de casa. Sobre todo, debéis tomarlos siguiendo la pauta que vuestro médico os ha prescrito.

Sin embargo, aunque sigamos al pie de la letra estas recomendaciones y los consejos de un profesional sanitario, a veces las complicaciones se producen. Por eso, merece la pena contar con ciertas coberturas y asistencia médica por si la situación se descontrola. Cabe recordar que en general un 30% de las crisis por asma que son atendidas en los servicios de urgencias precisan ingreso hospitalario y hasta el 20% de los casos graves requieren atención en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).

Seguir todos estos consejos te ayudará a disfrutar al máximo de tu tiempo evitando imprevistos desagradables, pero si además quieres contar con una seguridad extra, llámanos e infórmate sobre nuestro seguro de hospitalización, que te garantiza una renta diaria por cada día que estés hospitalizado por accidente, siendo el doble si es en UCI, lo que te ayudará a disponer de una atención de calidad y a mantener los gastos extra producidos por una hospitalización controlados.