Descubre por qué ocurre y cómo afecta a tu salud
Estás durmiendo y te empiezan a sonar las tripas, te levantas y vas directo a la nevera. ¿Te sientes identificado? En este post te contamos por qué nos dan los típicos antojos durante la noche y qué efectos tienen en tu salud.
Cuestión de ciencia.
Según un estudio publicado en la revista Obesity en el 2013, no importa ni qué ni cuánto hayas cenado, tener antojos cuando ya estás en la cama es algo muy común y pasa a menudo. Y es que en la mayoría de ocasiones, satisfacemos nuestra gula comiendo azúcares, carbohidratos o comida basura.
La experta en nutrición Suzanne Jezek-Arriaga desvela que el estrés tiene un papel fundamental ya que tiene el poder de influir sobre la hormona cortisol, causando perturbaciones en los niveles de azúcar del cuerpo.
¿Es tan malo como nos cuentan?
Definitivamente, sí. Comer a deshoras provoca consecuencias que van más allá de ganar peso. Según un estudio danés, los antojos nocturnos pueden causar muchos problemas de salud como reflujo, que a la larga pueden generar problemas más graves.
La clave está en tus horarios.
No existe una hora perfecta para cenar, pero lo que debes tener en cuenta es a qué hora sueles acostarte. Es recomendable acabar de cenar como mínimo dos horas antes de irse a dormir para una correcta digestión, por lo que la clave es combinar tus horarios para que no pase ni poco ni demasiado tiempo entre tu última comida y la hora de dormir.
¿Todavía con hambre?
Si de ninguna manera puedes acabar con los antojos nocturnos, intenta hacerlo de la manera más saludable posible. No tomes alimentos que contengan más de 150-200 calorías, intenta que sean alimentos ricos en melatonina (hormona del sueño), y sobre todo, evita la cafeína, el alcohol y los azúcares.
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