Los síntomas de un resfriado o de una gripe al llegar el invierno son bastante desagradables y ninguno queremos tenerlos, ¿verdad? Por eso es importante llevar una buena alimentación que nos proteja y nos ayude a evitarlo.

¿Qué alimentos que nos pueden ayudar a prevenir enfermedades en invierno?

Lo primero que debes saber es que lo que nos ayuda a prevenir estas enfermedades son las vitaminas (principalmente A, C y E), los ácidos grasos, el zinc y el selenio.

Algunos de los alimentos ricos en estas vitaminas son:

  • Vitamina A: hígado, yema de huevo, zanahoria, melón, naranja, calabaza y espinacas.
  • Vitamina C: tomates, cerezas, kiwi, uvas y zanahorias.
  • Vitamina E: avellanas, aceite de girasol y de oliva, espinacas, tomate y mango.
  • Ácidos grasos: pescados azules como el atún o la caballa.
  • Zinc: espárragos, lentejas y apio.
  • Selenio: marisco, pollo, carne roja, huevos y pescado.

Además, hay otros alimentos que son especialmente recomendables y otros que es mejor evitarlos:

Alimentos recomendables

Por un lado, es bueno:

  • Tomar cebolla ya que nos ayuda a prevenir los síntomas de la gripe y la congestión pulmonar (por lo que también es recomendable para combatir la rinitis y la bronquitis). 
  • También las nueces por su contenido de magnesio que ayuda a reforzar las defensas para luchar contra posibles enfermedades. 
  • El ajo (rico en vitamina B) ayuda a que el periodo de recuperación sea menor. 
  • El yogur es otro de los alimentos que ayuda a reforzar el sistema inmunológico formando una barrera que protege al cuerpo de las bacterias. 
  • Y, por último, la naranja, que por su alto contenido de vitamina C nos protege de resfriados y nos aporta energía.

Alimentos a evitar

Por otra parte, debes intentar evitar:

  • los azúcares, así como los lácteos, 
  • el tabaco y alcohol para evitar la congestión nasal y despejar el proceso respiratorio. 
  • También los productos que contengan cafeína, ya que pueden disminuir las defensas.

En MetLife queremos ayudarte a mejorar tu calidad de vida con estos consejos, que no constituyen asesoramiento técnico o clínico, por eso, si empiezas a notar algún síntoma o sospechas que puedes estar contrayendo una enfermedad, no dudes en acudir a un especialista para que te pueda observar, diagnosticar y recomendarte el tratamiento más adecuado para ti.