
Jugaba muchas tardes al Quién es Quién con mi amiga María. Sobre todo, tardes de lluvia. Una época de crecimiento donde agudizábamos la creatividad y el ingenio, preguntándonos hasta encontrar nuestro personaje. Una época donde pasamos de jugar con muñecos a jugar con juegos que nos hacían pensar. Nos hacíamos mayores.
Lo guardo cariño, porque compartíamos palabras, pero sobre tardes de crecimiento.
Posted: 09-08-2018