Independientemente del tipo de familia que quieras formar, la llegada de un nuevo miembro supone un punto de inflexión en tu vida. Por ello tienes que estar preparado para afrontar este nuevo reto.


Comenzar una familia es iniciar un proceso de cambios. Hay que dejar atrás tus rutinas individuales para dar paso a un pensamiento en plural. Son muchos los aspectos que debes tener en cuenta a la hora de empezar una familia, pero aquí tienes algunos aspectos básicos a considerar.   

 

 

• Planifica tu economía. Antes de tomar la decisión, tienes que tener estructurado un plan financiero para hacer frente a todos los gastos extra que conlleva ampliar la familia, desde el primer gran desembolso inicial hasta los gastos a largo plazo para mantener a los niños.

De media, un hijo supone al año un coste entre 7.000 y 11.000€ [1]. Haz un presupuesto con los gastos básicos de mantenimiento como educación, comida, ropa, salud o higiene; y diseña  un plan de actuación.

Aunque no es el único factor determinante, es importante que te encuentres con un respaldo económico que asegure la viabilidad en el futuro. La estabilidad laboral ofrece una seguridad para alcanzar ese objetivo, pero no te obsesiones con encontrar el momento perfecto para tener hijos.

En este punto también tendrás que considerar si los recursos de los que dispones actualmente son adecuados. ¿Tu vivienda tiene el espacio suficiente para albergar un nuevo miembro? ¿Es adecuada para un niño? Busca las soluciones necesarias para preparar tu nueva familia.

También puedes informarte acerca de las ayudas públicas disponibles que ofrece el Estado u otras organizaciones, como deducciones del IRPF, asignación económica por hijos o ayudas a la maternidad. Analiza tu caso para ver si tu situación es susceptible de ser beneficiaria de estas subvenciones. 


 Cambios en el ámbito personal. La estabilidad emocional es básica para acoger de manera exitosa el comienzo de una nueva familia.

Ser padres no es tarea fácil. Supone una ruptura con el individualismo para dar paso a una dedicación plena al grupo familiar. Tu tiempo, tu espacio y tu intimidad se verán interrumpidos por los cuidados del nuevo miembro, por lo que tendrás que trabajar tu fortaleza y la capacidad de adaptación a estos cambios.

En el caso de que quieras comenzar la familia con tu pareja, ambos debéis estar de acuerdo en este proyecto de vida conjunta. Hablad sobre qué esperáis de esta nueva etapa y cómo pensáis afrontarla juntos.

Es inevitable que la llegada de un hijo afecte a la pareja, pero todo dependerá de la actitud con la que afrontéis estos cambios. Por ello es recomendable que vuestra relación cuente con un buen nivel de comunicación y unas habilidades conjuntas sólidas para resolver problemas. 


Busca la conciliación laboral. La conciliación laboral es un punto clave que afecta directamente en la decisión de tener un hijo.

Habla con tu empresa para encontrar la mejor conciliación laboral con tu vida familiar. Puede que sea necesario la adaptación de horarios o reducción de la jornada laboral para compaginar este nuevo papel. En estos casos, ten presente un plan para compensar la disminución del sueldo ligada a ella.

Es necesario conocer los derechos que tienes como trabajador en este contexto. Infórmate sobre los días correspondientes por maternidad o paternidad, las excedencias por cuidado de un hijo o días por adopción.

Si vas a formar una familia con tu pareja, consensuad cómo vais a repartir los tiempos laborales y el cuidado del hijo.


 Infórmate y aprende a cada paso a vivir esta nueva etapa. Es normal que te encuentres perdido al enfrentarte por primera vez a este nuevo escenario de tu vida.

Ten paciencia e infórmate en todos aquellos aspectos en los que tengas dudas o necesites obtener más datos. Existen muchos libros, programas o blogs donde encontrar toda la información necesaria.

La experiencia de otras familias también es una buena guía para ayudarte en tu camino. Rodéate de personas experimentadas y no dudes en pedir ayuda si la necesitas.

 

Estos son solo algunos consejos a tener en consideración a la hora de ampliar la familia. Sin embargo, al final tú eres la única persona responsable de tomar las decisiones de tu vida.

Ten en cuenta que todo proceso conlleva un tiempo de adaptación. No desesperes en intentar mantener las cosas bajo control; lo más importante es la ilusión que tengas de comenzar tu nueva familia.

 

[1] II Informe de CEACCU sobe lo que cuesta un hijo.

Información Adicional:

Plan de Educación Financiera. CNMV y Banco de España Finanzas para todos, 2010. www.finanzasparatodos.es

La familia. Una mirada desde la Psicología.